Juzgan a un remisero acusado de haber llevado a los delincuentes que mataron a un policía
Desde este lunes Sebastián Dutra serñá juzgado por integrar la banda que asesinó a Mauricio Miño y es el único acusado ya que tres adolescentes detenidos por el hecho se fugaron de un hogar de menores donde estaban internados y están prófugos.
Un remisero será juzgado desde este lunes como acusado de haber integrado la banda que participó del crimen de un oficial de la Policía de la provincia de Buenos Aires, quien el año pasado fue asesinado de tres balazos al ser asaltado cuando se retiraba junto a su mujer, integrante de la misma fuerza, y sus tres hijos de la casa de unos amigos, en el partido bonaerense de La Matanza, informaron hoy fuentes judiciales.
Se trata de Sebastián Alejandro Dutra, quien será el único sentado en el banquillo de los acusados por el homicidio del efectivo Mauricio Ezequiel Miño (39) ya que otros tres adolescentes que también había sido detenidos por el hecho se fugaron del instituto de menores en el que estaban alojados y aún se encuentran prófugos y con orden de captura.
El juicio estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de La Matanza, mientras que el detenido Dutra llegó acusado de ser coautor del delito de “robo agravado por el uso de arma de fuego y homicidio agravado criminis causa”, que prevé penas de hasta 25 años de prisión.
En tanto, la fiscal Celia Cejas será la encargada de llevar la acusación frente a los jueces Alfredo Drocchi, Andrea Giselle Schiebeler y Matías Rouco.
El crimen de Miño
Según la elevación a juicio -a la que Télam tuvo acceso-, Miño, quien prestaba servicio en la Unidad de Policía de Prevención Local (UPPL) La Matanza, fue atacado la noche del 9 de marzo, cerca de las 22, en Paunero 78 casi esquina Boulogne Sur Mer, en la localidad de Villa Madero, en ese partido del sudoeste del conurbano.
En esa ocasión, el hombre estaba de franco y vestido de civil cuando se retiraba junto a su esposa -también policía- y sus tres hijos de la casa de una pareja amiga.
Como llovía, Miño fue hasta su Volkswagen Gol, lo puso en marcha y regresó hasta la puerta de la vivienda a buscar a su mujer, de 36 años, y a sus hijos de entonces 3, 6 y 10, para regresar a su domicilio en Gregorio de Laferrere, también en La Matanza.
En ese momento, tres delincuentes interceptaron a todos con fines de robo tras descender de un Chevrolet Agile de color negro, conducido por otro cómplice que aparentemente era Dutra.
Dos de los ladrones obligaron a ingresar a la casa a los propietarios del inmueble, mientras que el tercero le exigió las pertenencias a la esposa de Miño, quien quedó parado en la cinta asfáltica.
El policía hizo un ademán con la mano en su cintura y el delincuente se aproximó apuntándolo con su arma y, tras un breve forcejeo, le efectuó una patada tirándolo al piso.
Inmediatamente, el asaltante agarró la pistola Bersa Thunder Pro calibre 9 milímetros que la víctima llevaba, tras lo cual “con el fin de consumar su ilícito propósito y procurar su impunidad, le efectuó varios disparos con el arma de fuego que portaba, los cuales impactaron en su humanidad, causándole la muerte”.
Los delincuentes huyeron en el mismo vehículo en el que habían llegado y Miño fue trasladado por personal del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) La Matanza al Hospital Balestrini, de Ciudad Evita, adonde llegó muerto como consecuencia de las heridas de bala que había sufrido en la ingle, en una pierna (a la altura del fémur) y el abdomen.
Las detenciones
En tanto, tres adolescentes, entre ellos el presunto autor material del crimen, fueron detenidos nueve días después como sospechosos de haber cometido el homicidio, pero posteriormente se fugaron de los institutos en los que habían sido alojados y actualmente tienen pedidos de captura.
Por su parte, Dutra fue apresado en la noche del 15 de marzo del año pasado en Avenida Castañares y Avenida Piedra Buena, del barrio porteño de Mataderos, por personal de la Policía Federal Argentina (PFA).
El acusado tenía un pedido de detención ordenado por el juez de garantías Gustavo Banco, a cargo del Juzgado de Garantías 5 del Departamento Judicial La Matanza.
Dutra fue detenido cuando circulaba en el mismo auto usado para transportar a la banda y, en su interior, los efectivos hallaron un revólver calibre .38 Special Taurus con cuatro cartuchos del mismo calibre en su cargador.
De acuerdo a la imputación, el hombre trabajaba como remisero y, tras llevar a los adolescentes al lugar del hecho, los regresó al barrio de Villa Lugano en el que vivían.
Los investigadores lograron identificar el vehículo a través de las cámaras de seguridad, una de las cuales grabó el momento en el que descendieron los tres delincuentes y, luego del ataque, volvieron a subir al rodado.
La Policía hizo un relevamiento de las imágenes y determinó que cruzaron a la Ciudad de Buenos Aires, por lo que el Anillo Digital tomó la patente del Chevrolet que estaba a nombre de la madre de Dutra y él estaba autorizado a manejarlo.
Télam
- Fuente: