Asbesto en el subte – Medidas de fuerza este miércoles 5 de julio
Los trabajadores del subte retomaremos las medidas de lucha exigiendo solución a la crisis sanitaria de la red, paralizando el servicio el próximo miércoles 5. Interrumpiremos el servicio de todas las líneas en forma escalonada durante toda la jornada con el siguiente cronograma:
– 5.30 a 10 hs. líneas E y Premetro
– 10 a 14.30 hs. líneas A y B
– de 14.30 a 19 hs. líneas C y D
– de 19 hs. al fin del servicio línea H
A pesar de haber demostrado una vez más nuestra buena voluntad suspendiendo las medidas de fuerza durante 4 semanas frente a la convocatoria de la Subsecretaria de Trabajo de la Ciudad a una audiencia para discutir nuestra gravísima situación, no hemos conseguido ninguna propuesta concreta para avanzar en su solución. Solo hemos obtenido negativas y dilaciones de parte del Gobierno de la Ciudad y la empresa concesionaria Emova como respuesta a nuestros reclamos de desabestización integral de la red, cambio de flotas contaminadas, ingreso a vigilancia médica de todos los trabajadores y la reducción de la jornada laboral.
Es inaudito que los responsables de dar una solución inmediata a ésta crisis que ya provocó la muerte de 3 trabajadores, la afectación de la salud de otros 90 y que pone en riesgo la salud de millones de trabajadores, usuarios y vecinos, sigan incumpliendo normativas internacionales, leyes nacionales y fallos de la justicia Porteña. Por todo esto decimos claramente que tanto los funcionarios del Gobierno como los de Emova son delincuentes, que están por fuera de la ley y demuestran una actitud criminal contra millones de personas que trabajamos y/o utilizamos en el subterráneo de la Ciudad.
De más está decir que los trabajadores continuaremos con todas la medidas posibles para obtener una solución a nuestros reclamos en virtud de salvaguardar la salud y la vida de todos quiénes estamos en contacto con la red de subtes, llamamos a los usuarios y vecinos a exigir junto a nosotros la solución que corresponde a esta crisis de salud pública bajo tierra.
- Fuente: Karina Cambiella